No vamos a hablar de las diferentes maneras que han tenido y tienen algunas comunidades autónomas de seducir a sus votantes con el tema de la rebajada de impuestos.
Desde la siempre y temeraria presidenta de la comunidad de Madrid, rebajando impuestos a las grandes empresas para ejercer el efecto llamada, pasando por la de Andalucía haciéndolo con las rentas más altas, sin tapujos para hacerlo, hasta nuestra Comunidad Valenciana que lo quiere hacer con las rentas más bajas, está habiendo una catarata de gobiernos autonómicos que se están apuntando a la idea.
Ni que decir tiene que las posturas son clarificadoras. Por un lado están las comunidades gobernadas por el PP que tienden en ayudar descaradamente a las empresas y a sus rentas más altas. Una forma directa de favorecer a los ricos y marginar a los menos favorecidos aumentando la desigualdad entre ricos y más pobres. Por el otro, tenemos a la Comunidad Valenciana(siempre para nosotros País Valencià), con gobierno tripartito que nos da la sorpresa de ser la única por el momento que se inclina en favorecer, a priori, a los más débiles económicamente. Este es el camino que nos gustaría que todas las comunidades emprendieran. Solo se trata de hacer justicia. No siempre tienen que apretarse el cinturón los mismos para que solo unos pocos se beneficien de su sacrificio. Hay quien solo entiende de patriotismo cuando se es el único beneficiario y que se jodan todos los demás (recuérdese las palabras despectivas hacia los desfavorecidos pronunciadas por una diputada del PP por Castellón, en el Congreso).
Pero lo que queremos resaltar aquí, es la polvareda que en un principio ha generado, no ya en los grupos de la derecha y ultras, sino en el propio partido del President, el muy partido SOCIALISTA y OBRERO español. Y todo por no haber consultado su decisión a la Central de Ferraz.
Nosotros los carlistas entendemos que el ser Confederales y Autogestionarios implica que no tengamos que depender de instancias superiores para que nos den el VºBº a cualquier iniciativa que tengamos. Que las decisiones deben tomarlas los afectados y no los que en nada les afecta. Eso es ser autónomos y lo otro centralismo. Pero no pasemos de ser autónomos en nuestra Comunidad a ser centralistas en nuestro territorio. Las comarcas deben tener su propia autonomía, y éstas, a su vez, no han de ser centralistas con sus pueblos ya que éstos también tienen que ser autónomos. En eso se basa el principio de subsidiariedad, condición indispensable, en una auténtica democracia.
A mi me interesa que nuestro gobierno Valenciano, mire con lupa la precariedad. He trabajado en el sector de la limpieza y tengo que decir que por lo que he visto en alguna nómina, no se llega a los 1000 euros. No es ciencia ficción. Yo lo he visto. Por cierto feliz 9 de octubre por adelantado.